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Estufas de Combustión Lenta ¿Por Qué son Mejores?

Estufas de Combustión Lenta ¿Por Qué son Mejores? 1

Las estufas de combustión lenta se caracterizan por tener un sistema de entrada de aire secundario a parte del primario que permite que la combustión de la leña sea más lenta y dure más en las salamandras de leña.

El objetivo de las estufas de leña en comparación con los hogares de leña abiertos es que consuman menos leña que los hogares abiertos y que calienten más.

Por eso en un primer momento la diferencia entre uno y otro modelo de calefacción a leña se diferenciaba en la puerta que permitía reducir la velocidad de combustión cerrando el tiro de entrada de aire primario.

Esta entrada de aire primario se encuentra en el cajón recogecenizas y es el que aporta oxígeno para el quemado de la leña por la parte de abajo de la salamandra.

Los departamentos de investigación y desarrollo de los fabricantes de estufas de leña buscaron sistemas para conseguir que el quemado de la leña fuese más lento para no tener que estar introduciendo troncos cada dos por tres.

Estufas de combustión lenta con duración de una carga entre 4 y 6 horas.

Agujeros de entrada de aire en estufas de combustión lenta

Para tener claro la diferencia entre los modelos de estufas de leña tradicionales y las estufas de combustión de lenta vamos a explicar las entradas de aire.

Todas tienen debajo del cajón recogecenizas la entrada de aire primario, por ahí es por donde entra el aire cuando encendemos la estufa de leña y coge fuerza y asienta el tiro.

Cuando abrimos esta entrada de aire vemos como la velocidad de las llamas sube y suena como un soplete quemando leña.

Por eso uno de los trucos para que gasten menos leña es tener el cajón recogecenizas medio lleno para que no entre mucha cantidad de aire.

Después los fabricantes de estufas de leña diseñaron una entrada de aire secundario que normalmente se encuentra en una pestaña encimade la puerta de la salamandra que se conoce como sistema de combustión lenta.

Esta pestaña nos permite cerrar la centrada de aire primario y abriendo esta el quemado de la leña se produce más lentamente.

De ahí el nombre de estufas de combustión lenta.

En algunos modelos están consiguiendo que con una carga de leña esté produciendo calor entre 5 a 8 horas.

Lo que está muy bien porque nos reduce el consumo y el tener que estar pendientes de estar recargando la estufa con troncos de leña cada dos por tres.

¿Es lo mismo estufa de combustión lenta que el sistema de doble combustión?

Aunque la idea es parecida no es exactamente lo mismo.

El sistema de doble combustión lo que hace es a través de un conducto situado por debajo de la cámara de combustión aporta aire precalentado al interior de la cámara.

Se ha descubierto que la reacción química del quemado de la leña es diferente con aire frío que con aire precalentado.

Y que con este aire precalentado se producen menos emisiones de CO a la atmósfera, por eso hoy en día en Europa prácticamente todas las salamandras de leña llevan este sistema de doble combustión.

Pero no es lo mismo que el sistema de estufas de leña de combustión lenta que también aportan este aire a la cámara de combustión pero puede ser precalentado o no.

Ya que algunos fabricantes aprovechan el sistema de combustión lenta como sistema de doble combustión pero no es en todos así.

¿La doble cámara en estufas de leña es lo mismo que el quemado de leña lento?

Leyendo en internet encontré algunas tiendas que explicaban que el sistema de doble cámara que llevan algunas estufas de leña es el sistema de combustión lenta.

Y esto no es correcto.

La estufas de doble cámara que podéis leer toda la información en el artículo hecho a propósito lo que permiten es calentar por convección a parte de por radiación.

Lo que permite que el calor llegue más rápido y a más distancia.

Pero no reduce la velocidad de combustión.

Normalmente estas salamandras de leña con doble cámara más avanzadas suelen llevar incorporadas el sistema de combustión lenta de ahí que sea fácil entender la confusión.

Ventajas de las estufas de combustión lenta

Las estufas de combustión lenta se han convertido en una opción destacada para calentar hogares debido a sus múltiples beneficios.

A continuación, exploramos en profundidad las razones por las cuales estas estufas son una opción superior a otros modelos.

Eficiencia energética superior

Las estufas de combustión lenta están diseñadas para maximizar la eficiencia energética. Gracias a tecnologías avanzadas, estas estufas logran una combustión más completa del combustible, lo que se traduce en una mayor generación de calor con menos recursos.

Este diseño permite que el combustible, como la leña, se queme de manera más lenta y uniforme, aprovechando al máximo cada pieza de madera.

Además, las estufas de combustión lenta suelen incorporar sistemas de control del aire que regulan la entrada de oxígeno a la cámara de combustión.

Esto no solo optimiza el proceso de quema, sino que también prolonga la duración del combustible, reduciendo la necesidad de recargas frecuentes y, por ende, disminuyendo los costos operativos a largo plazo.

Reducción de la contaminación

Una de las principales ventajas de las estufas de combustión lenta es su capacidad para minimizar la emisión de contaminantes.

A diferencia de las estufas tradicionales, estas estufas están diseñadas para emitir menos humo y gases tóxicos.

Esto se logra mediante sistemas de postcombustión que queman los gases residuales, reduciendo significativamente la emisión de monóxido de carbono y otras partículas nocivas.

Este enfoque no solo es beneficioso para el medio ambiente, sino que también mejora la calidad del aire dentro del hogar.

La reducción de la contaminación del aire interior es crucial para la salud de los habitantes, especialmente en hogares con niños, ancianos o personas con problemas respiratorios.

Control preciso de la temperatura

Las estufas de combustión lenta ofrecen un control superior de la temperatura. Mediante la regulación precisa de la entrada de aire en la cámara de combustión, es posible ajustar la intensidad del fuego y, por tanto, la cantidad de calor generado.

Esto permite mantener una temperatura constante y confortable en el hogar, evitando fluctuaciones bruscas que pueden ser incómodas.

El control de la temperatura también permite una mayor personalización, adaptando el nivel de calor a las necesidades específicas de cada momento.

Esto no solo mejora el confort, sino que también contribuye a un uso más eficiente del combustible, maximizando la economía y el rendimiento energético.

Durabilidad y mantenimiento reducido

Las estufas de combustión lenta están construidas con materiales de alta calidad, como el hierro fundido y el acero, que son altamente resistentes al calor y al desgaste.

Esta robustez se traduce en una mayor durabilidad, permitiendo que las estufas mantengan su rendimiento y apariencia a lo largo de los años.

Además, estas estufas requieren menos mantenimiento que otros modelos. La combustión lenta produce menos residuos y hollín, lo que significa que la limpieza y el mantenimiento son menos frecuentes y menos laboriosos.

Esto no solo ahorra tiempo y esfuerzo, sino que también reduce los costos asociados al mantenimiento regular.

Estética y confort

Además de sus beneficios funcionales, las estufas de combustión lenta también destacan por su estética. Estas estufas suelen tener un diseño clásico y elegante que puede complementar cualquier estilo de decoración.

La visión del fuego ardiendo a través de la puerta de vidrio añade un toque acogedor y relajante al ambiente del hogar.

El fuego de una estufa de combustión lenta no solo proporciona calor físico, sino que también crea una atmósfera cálida y reconfortante.

Este aspecto es especialmente valioso durante los meses fríos del invierno, cuando un hogar cálido y acogedor se convierte en un refugio contra el clima exterior.

Conclusión

Las estufas de leña de combustión lenta ofrecen una combinación única de eficiencia energética, reducción de la contaminación, control preciso de la temperatura, durabilidad y estética.

Estas características las hacen destacar como una opción superior para la calefacción del hogar.

Si estás buscando una solución de calefacción que sea eficiente, ecológica y estéticamente agradable, una estufa de combustión lenta puede ser la elección ideal.