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¿Por que Tengo que Poner Tubo en una Chimenea de Obra?

Sobre la necesidad de poner tubo en una chimenea, un visitante de nuestro blog se preguntaba las razones para que hubiese que instalar tubo en una chimenea, cassette o insert de leña que va encastrado en una chimenea de obra que ya tiene el tiro de la chimenea de obra hecho.

La razón principal es porque así lo han diseñado los ingenieros que las han fabricado y según sus principios de funcionamiento han de llevar instalado tubo y trabajar con una depresión entre 10 a 13 pascales.

Salvo unos pocos modelos que han sido diseñados para poder instalarse sin tubo en obra como hablamos en otro artículo las demás si que han de llevar tubo.

Es más en la mayoría de casos no basta con entubar el aparato al cañón de la chimenea de obra si no que se ha de llegar hasta el ras superior de la salida de humos.

Ya que de lo contrario podemos tener problemas de revoco de humos por el peso del aire frío en el interior del cañón de obra.

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Y tener problemas de condensación por el vapor de agua presente en el humo de la leña quemada que condensa por el enfriamiento en el interior del revestimiento de obra.

Las chimeneas de obra son elementos esenciales en muchas viviendas y edificaciones, ya que cumplen varias funciones fundamentales.

Además de brindar un ambiente acogedor y cálido, estas chimeneas son responsables de evacuar los humos y gases generados por la combustión, garantizando así la seguridad y la comodidad en el interior de los espacios.

Una chimenea de obra está compuesta por una estructura sólida construida con materiales resistentes al fuego, como ladrillos refractarios o piedra.

Su diseño permite la salida controlada de humos y gases producidos por la quema de combustibles, como la leña o el gas.

Sin embargo, para que este proceso de evacuación sea eficiente y seguro, es necesario instalar un tubo en la chimenea.

El tubo desempeña un papel crucial al asegurar que los humos sean evacuados correctamente, evitando así su acumulación en el interior de la vivienda.

Este elemento actúa como una vía de escape, guiando los gases hacia el exterior y evitando que se dispersen en el ambiente habitable.

Además, el tubo también contribuye al aislamiento térmico y mejora el rendimiento general de la chimenea.

A lo largo de este artículo, exploraremos en detalle por qué es necesario instalar un tubo en una chimenea de obra.

Analizaremos la importancia de una correcta evacuación de humos, el papel del tubo en el aislamiento térmico y cómo influye en el rendimiento de la chimenea.

También discutiremos los diferentes tipos de tubos disponibles en el mercado y las consideraciones adicionales que se deben tener en cuenta al instalar un tubo en una chimenea de obra.

Continúa leyendo para descubrir todo lo que necesitas saber sobre este aspecto fundamental de las chimeneas de obra y cómo contribuye a una experiencia segura y eficiente.

Funcionamiento de una chimenea de obra

Una chimenea de obra tiene la importante tarea de expulsar de manera segura y eficiente el humo y los gases generados durante la combustión.

Para comprender su funcionamiento, es esencial conocer dos conceptos fundamentales: el proceso de tiro y la evacuación de humos.

El proceso de tiro se refiere al flujo ascendente de aire caliente y humos que se produce dentro de la chimenea. Este flujo es generado por la diferencia de temperatura entre el interior de la chimenea y el exterior.

Cuando se enciende un fuego en la chimenea, el aire caliente se eleva y crea una corriente ascendente. Esta corriente de aire, conocida como corriente de tiro, extrae los humos y los gases producidos por la combustión hacia el exterior.

Una buena evacuación de humos es fundamental para mantener un ambiente seguro y libre de gases tóxicos en el interior de la vivienda.

Si los humos no son evacuados de manera adecuada, pueden acumularse en el espacio habitable, lo que puede ser peligroso para la salud de los ocupantes.

Además, una mala evacuación de humos puede generar problemas como la formación de condensación, la obstrucción de la chimenea y un rendimiento deficiente de la chimenea.

Es importante destacar que el funcionamiento correcto de una chimenea de obra depende de varios factores. Uno de los elementos clave es la altura de la chimenea.

Una chimenea más alta crea un mayor tiro, lo que favorece una mejor evacuación de los humos. Además, la calidad del fuego y la eficiencia de la combustión también influyen en el proceso de tiro.

Una chimenea de obra bien diseñada y correctamente instalada proporciona un tiro adecuado y una evacuación eficiente de los humos.

Esto no solo garantiza la seguridad en el interior de la vivienda, sino que también contribuye al rendimiento óptimo de la chimenea.

Una buena evacuación de humos ayuda a evitar la acumulación de residuos como hollín y creosota, lo que a su vez reduce los riesgos de incendio y mejora la eficiencia energética de la chimenea.

Importancia del tubo en una chimenea de obra

El tubo desempeña un papel crucial en la correcta evacuación de los humos producidos por la combustión en una chimenea de obra.

Actúa como una vía de escape, permitiendo que los gases se dirijan hacia el exterior de manera eficiente. El tubo está diseñado para crear un conducto seguro y libre de obstrucciones, lo que garantiza que los humos sean expulsados adecuadamente.

Una mala evacuación de humos puede tener consecuencias graves para la salud y la seguridad. Si los humos no se expulsan correctamente, pueden acumularse en el interior de la vivienda, lo que provoca la inhalación de gases tóxicos, como el monóxido de carbono.

La exposición prolongada a estos gases puede ser peligrosa e incluso fatal. Por lo tanto, es crucial contar con un tubo adecuado que permita una evacuación segura de los humos, protegiendo así la salud de los ocupantes.

Aislamiento térmico

Otra función importante del tubo en una chimenea de obra es proporcionar aislamiento térmico. Durante el proceso de combustión, se generan altas temperaturas en el interior de la chimenea.

Si no se cuenta con un tubo adecuado, el calor puede transferirse a los materiales de construcción de la chimenea y las estructuras adyacentes, lo que aumenta el riesgo de daños estructurales y el peligro de incendios.

El tubo actúa como una barrera térmica, evitando que el calor se propague hacia el exterior de la chimenea. Está diseñado con materiales resistentes al calor, como acero inoxidable, que tienen propiedades de aislamiento térmico.

Al mantener el calor confinado dentro del tubo, se reducen los riesgos de daños en la estructura y se asegura la seguridad de la vivienda.

Mejora del rendimiento

Un tubo adecuado también puede mejorar el rendimiento y la eficiencia general de una chimenea de obra. Ayuda a prevenir la formación de condensación y la acumulación de hollín en el interior de la chimenea.

El tubo permite que los gases de combustión sean evacuados de manera más eficiente, lo que reduce la probabilidad de que se condensen en las paredes de la chimenea.

La formación de condensación y la acumulación de hollín no solo pueden obstruir la chimenea, sino que también disminuyen la capacidad de extracción de humos y afectan negativamente el rendimiento de la chimenea.

Además, un tubo adecuado contribuye a mantener un flujo de aire constante y una presión equilibrada dentro de la chimenea.

Esto promueve una combustión más eficiente y una mayor extracción de humos. Como resultado, se logra un mejor rendimiento en términos de capacidad de calefacción y aprovechamiento de la energía generada por el fuego.

Tipos de tubos para chimeneas de obra

Tubos de acero inoxidable

Los tubos de acero inoxidable son una opción popular y ampliamente utilizada en chimeneas de obra debido a sus numerosas ventajas.

Estos tubos están fabricados con acero inoxidable de alta calidad, lo que les proporciona características específicas y los hace altamente adecuados para su aplicación en chimeneas.

  1. Resistencia a la corrosión: El acero inoxidable es conocido por su excepcional resistencia a la corrosión. Esto significa que los tubos no se corroen fácilmente cuando están expuestos a la humedad y los productos de combustión, lo que prolonga su vida útil y garantiza un funcionamiento seguro y duradero de la chimenea.
  2. Durabilidad: Los tubos de acero inoxidable son altamente duraderos y resistentes. Pueden soportar las altas temperaturas generadas por la combustión sin deformarse ni deteriorarse. Esto los hace ideales para su uso en chimeneas de obra, donde se enfrentan a condiciones extremas y continuas de calor.
  3. Fácil mantenimiento: Los tubos de acero inoxidable son relativamente fáciles de mantener. Debido a su resistencia a la corrosión, no requieren tratamientos especiales para protegerse contra el óxido u otros daños. Además, su superficie lisa facilita la limpieza y la eliminación de residuos de hollín y creosota.
  4. Variedad de tamaños y formas: Los tubos de acero inoxidable están disponibles en una amplia variedad de tamaños y formas para adaptarse a diferentes tipos de chimeneas y requisitos específicos. Esto brinda flexibilidad al momento de seleccionar el tubo adecuado para la construcción de la chimenea de obra.
  5. Compatibilidad con otros sistemas: Los tubos de acero inoxidable son compatibles con otros sistemas de chimenea, como los sombreretes y los aislamientos. Esto facilita la integración del tubo en el diseño general de la chimenea y garantiza un funcionamiento eficiente y seguro.

Los tubos de acero inoxidable son una opción popular y confiable para las chimeneas de obra. Su resistencia a la corrosión, durabilidad, facilidad de mantenimiento y variedad de tamaños los convierten en una elección óptima para garantizar una evacuación segura de humos y un funcionamiento eficiente de la chimenea.

Tubos de doble pared

Los tubos de doble pared son otra opción comúnmente utilizada en chimeneas de obra debido a sus ventajas en términos de aislamiento térmico y seguridad.

  1. Aislamiento térmico: Los tubos de doble pared están diseñados con una capa interna y una capa externa, creando un espacio de aire entre ellas. Este espacio actúa como una barrera de aislamiento térmico, evitando la transferencia de calor hacia los materiales de construcción de la chimenea y las estructuras adyacentes. El aislamiento térmico ayuda a mantener la temperatura del humo dentro del tubo, mejorando así la eficiencia de la combustión y evitando la formación de condensación.
  2. Seguridad: Los tubos de doble pared también brindan una capa adicional de seguridad. La capa externa del tubo permanece a una temperatura más baja, lo que reduce el riesgo de quemaduras accidentales al tocar la superficie de la chimenea. Además, al evitar que el calor se transmita a los materiales circundantes, se reduce el riesgo de incendios en la estructura de la vivienda.
  3. Prevención de condensación: La formación de condensación en una chimenea puede ser problemática, ya que puede provocar daños en las paredes de la chimenea y la acumulación de residuos. Los tubos de doble pared, al proporcionar un aislamiento térmico efectivo, ayudan a prevenir la condensación al mantener la temperatura del humo dentro del tubo, evitando así que se enfríe y se condense en las paredes de la chimenea.

Otros tipos de tubos disponibles en el mercado

Además de los tubos de acero inoxidable y los tubos de doble pared, existen otros tipos de tubos utilizados en chimeneas de obra, cada uno con características y aplicaciones específicas.

  1. Tubos de cerámica: Los tubos de cerámica son conocidos por su excelente capacidad de aislamiento térmico. Son resistentes a altas temperaturas y ayudan a mantener el calor dentro del tubo, mejorando la eficiencia de la combustión. Sin embargo, su instalación y manejo pueden requerir precauciones adicionales debido a su fragilidad.
  2. Tubos flexibles: Los tubos flexibles son una opción versátil y fácil de instalar en chimeneas de obra. Están hechos de acero inoxidable corrugado y pueden ajustarse y adaptarse a diferentes configuraciones de chimenea. Son ideales cuando se requiere una instalación más flexible y se necesitan curvas o ángulos.

Es importante tener en cuenta que la elección del tipo de tubo dependerá de las necesidades específicas de la chimenea, la configuración del sistema y las regulaciones locales.

Consultar con un profesional en chimeneas o especialista en construcción es recomendable para determinar el tipo de tubo más adecuado para cada situación.

Consideraciones adicionales al instalar un tubo en una chimenea de obra

Normativas y regulaciones

Al instalar un tubo en una chimenea de obra, es fundamental cumplir con las normativas locales y las regulaciones de seguridad aplicables.

Las normativas varían según la ubicación geográfica, por lo que es importante investigar y familiarizarse con los requisitos específicos de la zona.

Algunas de las regulaciones comunes pueden incluir la altura mínima del tubo, las distancias de seguridad con respecto a materiales inflamables y la necesidad de certificaciones de calidad.

Es recomendable contactar a las autoridades competentes, como el departamento de construcción o bomberos local, para obtener información precisa sobre las normativas y regulaciones vigentes.

Cumplir con estos requisitos es esencial para garantizar la seguridad y el cumplimiento legal de la instalación de la chimenea de obra.

Profesionales cualificados

Se recomienda encarecidamente contratar a profesionales cualificados para la instalación del tubo y la construcción de la chimenea de obra.

Estos expertos tienen el conocimiento y la experiencia necesarios para realizar un trabajo seguro, eficiente y de calidad.

Al contratar a profesionales cualificados, se asegura que la instalación cumpla con los estándares de seguridad y se evitan posibles problemas en el futuro.

Los profesionales cualificados pueden ofrecer asesoramiento sobre el tipo de tubo más adecuado para la chimenea de obra, teniendo en cuenta las especificaciones y necesidades particulares.

Además, tienen la capacidad de evaluar la estructura existente y garantizar que la instalación del tubo sea segura y adecuada.

Antes de contratar a un profesional, es recomendable solicitar referencias y verificar su experiencia y cualificaciones.

Puede ser útil consultar con otros propietarios de viviendas que hayan realizado trabajos similares o buscar recomendaciones en asociaciones de constructores o profesionales del sector.

NECESIDAD DE TUBOS EN LOS INSERT CASSETTES DE LEÑA

El principio de funcionamiento de estos aparatos es que el fuego calienta el hierro del hogar y al tiempo calienta los tubos que están conectados al aparato, al transmitirse el calor por el acero, lo que hace que el aire de dentro se caliente, pese menos y tienda a subir, creando lo que se denomina como depresión o tiro.

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En el caso de una chimenea de obra, al no estar conectado a la chimenea, y ser peor conductor del calor el ladrillo que el acero, el aire de dentro de la chimenea de obra no se calienta en la misma medida en que lo hace con el acero, lo que a veces puede generar problemas de revoco de humos, ya que el humo caliente cuando sale del aparato se topa con el aire frío que le hace de tapón, si el mismo está muy frío el humo se acumula en la cámara de combustión, y si la casa la tenemos más caliente que el aire del tubo, el humo tendrá tendencia a salir por las ranuras del cristal y por el cajón recogecenizas.

Si a veces pasa incluso teniendo instalado tubo de acero, por eso se recomienda en el encendido por leña fina que haga poco humo y mucha llama para calentar cuanto antes el aparato y el tiro, y se nos puede acumular aire en la cámara de combustión, sobre todo si cuando ponemos la pastilla de encendido, cerramos la puerta y forzamos el tiro, en el caso de chimenea de ladrillo el fenómeno se puede dar con más contundencia.

Y al no tener tubo instalado, la depresión no sería la correcta, y el funcionamiento del insert, cassete u hogar no sería el óptimo para el que ha sido diseñado, por lo que estaríamos perdiendo rendmiento que nos podría proporcionar el aparato, de ahí la necesidad de seguir las indicaciones del libro de instrucciones del aparato e instalar tubo para obtener una depresión entre 10 a 13 pascales.

Poner tubo en una chimenea hasta el ras exterior exterior o sólo un par de metros.

Muchas personas piensan que como tienen ya el cañón de la chimenea de obra es suficiente con poner tubo en una chimenea usando sólo un par de metros de tubería de humos.

Pero lo cierto, es que lo realmente correcto, es instalar los elementos de fumistería hasta el ras superior de la salida de humos.

Esto se hace para evitar dos problemas serios que nos pueden ocurrir.

Revoco de humos por el aire frío del interior del cañón.

Hemos de pensar que el aire del interior del cañón de obra de la chimenea de ladrillos está frío.

Por lo que si sólo entubabos un par de metros de tubería de salida de humos el humo caliente se encontrará con un tapón de aire frío que debe empujar hacia arriba.

Dependiendo de la temperatura del mismo puede provocar que se generen problemas de revoco de humos.

Condensación del vapor del agua del humo

La leña siempre tiene una porcentaje de humedad en forma de agua que se convierte en vapor cuando se quema.

Este vapor de agua al contacto con el aire frío puede volver a condensar produciéndose condensación y chorretones que puede dañar el tubo y el mismo aparato.

Por eso lo conveniente es poner tubo en una chimenea hasta el ras superior de la salida de obra.

Poner tubo en una chimenea mejor el tiro

Para mejorar el tiro es necesario poner tubo en una chimenea hasta el límite superior de la construcción.

El aparato calentará la tubería de acero y ésta calentará el aire de dentro haciendo que pese menos creándose la depresión o tiro.

Por lo que si vemos que no nos funciona bien el aparato lo más probable es por falta de tiro, es decir, más metro de tuberia instalada.

Meter tubo por chimenea

La acción física de instalar un tubo en una chimenea, aquí te brindo algunos pasos generales para realizar esta tarea.

Es importante tener en cuenta que estos pasos son solo una guía general y que pueden variar según el tipo de chimenea y las condiciones específicas de instalación.

En cualquier caso, se recomienda consultar con un profesional antes de realizar cualquier trabajo relacionado con la instalación de tubos en chimeneas.

Preparación

  • Asegúrate de tener el tubo adecuado para tu chimenea, teniendo en cuenta el material, las dimensiones y los requisitos de seguridad.
  • Verifica que la chimenea esté limpia y libre de obstrucciones antes de comenzar la instalación.

Medición y corte

  • Mide la distancia desde la parte inferior de la chimenea hasta la salida exterior.
  • Utilizando las medidas tomadas, marca el tubo y corta el exceso si es necesario. Asegúrate de usar las herramientas adecuadas y seguir las instrucciones del fabricante para un corte preciso.

Montaje del tubo

  • Coloca el extremo inferior del tubo en la abertura de la chimenea, asegurándote de que esté correctamente alineado.
  • Si el tubo es de doble pared, inserta el extremo inferior dentro del tubo exterior y asegúralo según las instrucciones del fabricante.
  • Continúa montando los tramos adicionales del tubo, uniendo las secciones y asegurándote de que estén bien ajustadas y selladas.

Fijación y sellado

  • Utiliza abrazaderas o soportes adecuados para fijar el tubo a la chimenea y a la estructura circundante, asegurando su estabilidad y resistencia.
  • Aplica sellador resistente al calor en las conexiones del tubo para evitar fugas de humos y gases.

Salida exterior

  • Instala una tapa o sombrero en la salida exterior del tubo para evitar la entrada de agua, animales o escombros.
  • Asegúrate de que la salida esté ubicada a una altura adecuada y cumpla con las regulaciones locales.

Recuerda que la instalación de tubos en chimeneas puede variar dependiendo del tipo de chimenea (leña, gas, etc.) y las especificaciones particulares.

Siempre es recomendable consultar con un profesional o especialista en chimeneas para asegurarse de que la instalación se realice correctamente y cumpla con las normativas de seguridad.

Tiro chimenea de obra

El tiro de una chimenea de obra se refiere a la capacidad de la chimenea para crear un flujo de aire ascendente que permita la correcta evacuación de los humos y gases producidos por la combustión.

Un buen tiro es esencial para asegurar un funcionamiento eficiente y seguro de la chimenea. A continuación, te explico algunos aspectos importantes sobre el tiro de una chimenea de obra:

  1. Definición y funcionamiento del tiro:
    • El tiro es el efecto de succión que se produce en una chimenea cuando el aire caliente se eleva.
    • La combustión en la chimenea genera gases calientes y humo que tienden a ascender debido a su menor densidad en comparación con el aire frío circundante.
    • La diferencia de temperatura entre el aire caliente dentro de la chimenea y el aire exterior crea un gradiente de presión que produce un flujo ascendente de aire conocido como tiro.
  2. Importancia de un buen tiro:
    • Un tiro adecuado es esencial para asegurar que los humos y gases se evacuen correctamente, evitando la acumulación de gases tóxicos en el interior y minimizando la posibilidad de retroceso de humo.
    • Un buen tiro también favorece una combustión eficiente, permitiendo que el oxígeno necesario para la combustión ingrese de manera adecuada al fuego.
    • Además, un tiro insuficiente puede generar problemas como la formación de condensación, la reducción del rendimiento y la aparición de humo o malos olores en el interior de la vivienda.
  3. Factores que influyen en el tiro:
    • La altura de la chimenea: Una chimenea más alta crea una mayor diferencia de temperatura y, por lo tanto, un tiro más fuerte.
    • El diámetro y diseño del conducto: Un conducto adecuado y bien diseñado permite un flujo de aire sin restricciones y minimiza la pérdida de calor.
    • La temperatura del humo: Cuanto más caliente sea el humo, mayor será el impulso ascendente y mejor será el tiro.
    • El viento: Las corrientes de aire externas pueden influir en el tiro de la chimenea, tanto positiva como negativamente. En algunos casos, puede ser necesario instalar dispositivos antirrevoco para contrarrestar el efecto del viento.
  4. Mantenimiento del tiro:
    • Es importante realizar un mantenimiento regular de la chimenea para asegurar un tiro óptimo. Esto incluye la limpieza periódica del conducto de humos y la eliminación de obstrucciones que puedan dificultar el flujo de aire.
    • En caso de experimentar problemas de tiro, como retroceso de humo o dificultad para encender o mantener el fuego, se recomienda consultar a un profesional para evaluar y corregir cualquier problema.

El tiro de una chimenea de obra es esencial para asegurar una correcta evacuación de humos y gases, así como una combustión eficiente.

Mantener un buen tiro requiere tener en cuenta diversos factores, como la altura de la chimenea, el diseño del conducto y el mantenimiento regular.

Siempre es recomendable buscar asesoramiento de un profesional para garantizar un funcionamiento seguro y eficiente de la chimenea.

Entubar chimenea de obra

Entubar una chimenea de obra puede ser necesario por diversas razones, como mejorar el rendimiento, asegurar la evacuación de humos y gases de manera segura, o proporcionar aislamiento térmico.

Aquí te brindo un proceso general para entubar una chimenea de obra:

  1. Evaluación y preparación:
    • Inspecciona la chimenea existente para determinar si es necesario entubarla. Considera el estado de la chimenea, el rendimiento de la evacuación de humos y cualquier problema que pueda estar presente.
    • Asegúrate de tener los materiales adecuados para el entubado de la chimenea, como el tubo de chimenea y los accesorios correspondientes.
  2. Medición y corte del tubo:
    • Mide la altura y diámetro del conducto de la chimenea existente.
    • Corta el tubo de chimenea al tamaño adecuado, teniendo en cuenta las dimensiones del conducto y los requisitos de seguridad.
  3. Instalación del tubo:
    • Introduce el tubo en el conducto de la chimenea, asegurándote de que esté correctamente alineado y encajado de manera segura.
    • Utiliza bridas o abrazaderas adecuadas para fijar el tubo al conducto de la chimenea y asegurar su estabilidad.
  4. Conexiones y sellado:
    • Si se requieren conexiones adicionales, como cambios de dirección o empalmes, utiliza los accesorios apropiados según las instrucciones del fabricante.
    • Aplica sellador resistente al calor en las conexiones del tubo para evitar fugas de humos y gases.
  5. Salida exterior:
    • Asegúrate de que la salida exterior del tubo esté ubicada a una altura adecuada y cumpla con las regulaciones locales.
    • Instala una tapa o sombrero en la salida exterior para evitar la entrada de agua, animales o escombros.

Recuerda que cada chimenea de obra puede tener características y requisitos específicos, por lo que es recomendable consultar con un profesional o especialista en chimeneas antes de entubar una chimenea.

Además, es importante seguir las normativas y regulaciones locales relacionadas con la instalación de tubos de chimenea.

Un profesional calificado podrá evaluar tus necesidades específicas y garantizar una instalación segura y eficiente.

Conclusiones

En conclusión, la instalación de un tubo en una chimenea de obra es fundamental por diversas razones que garantizan su correcto funcionamiento y seguridad.

A lo largo de este artículo, hemos explorado las principales razones que respaldan la necesidad de instalar un tubo en una chimenea de obra.

En primer lugar, hemos comprendido la importancia de una evacuación segura de humos. Un tubo adecuado permite la expulsión eficiente de los humos y los gases de combustión, evitando su acumulación en el interior de la vivienda.

Esto no solo asegura un ambiente libre de gases tóxicos, sino que también reduce el riesgo de asfixia y mejora la calidad del aire en el interior.

Asimismo, hemos destacado el papel del tubo en el aislamiento térmico de la chimenea de obra. El tubo actúa como una barrera que evita la transferencia de calor hacia los materiales de construcción de la chimenea y las estructuras adyacentes.

Esto ayuda a prevenir daños estructurales, riesgos de incendio y la acumulación de condensación en las paredes de la chimenea.

Además, hemos señalado que un tubo adecuado contribuye a mejorar el rendimiento general de la chimenea de obra.

Un buen tubo evita la formación de condensación y depósitos de hollín, lo que mantiene la eficiencia de la combustión y prolonga la vida útil de la chimenea. También favorece una mejor circulación del aire y una mayor eficiencia energética.

En resumen, la instalación de un tubo en una chimenea de obra es esencial para garantizar una evacuación segura de humos, proporcionar aislamiento térmico y mejorar el rendimiento global de la chimenea. Estos aspectos contribuyen a un ambiente seguro, confortable y eficiente en el hogar.

Es importante tener en cuenta las normativas y regulaciones locales al instalar un tubo, así como buscar la asistencia de profesionales cualificados para asegurar una instalación correcta y de calidad.

Al tomar todas estas consideraciones en cuenta, se puede disfrutar plenamente de los beneficios de una chimenea de obra con un tubo adecuado, brindando calidez, confort y seguridad en el hogar.