Dentro de las tareas de mantenimiento de nuestra chimenea, una que deberemos realizar habitualmente es la de limpiar el cristal de la chimenea.
La frecuencia de la limpieza variará en función de lo que se ensucie el cristal de nuestra chimenea, ya que según diferentes factores el cristal de una chimenea se ensuciará más o menos.
El hecho de tener el cristal de la chimenea sucio, no influye en el funcionamiento de la misma, en la cantidad de calor que da, simplemente, perdemos el elemento estético que tanto gusta, que es la visión del fuego.
Por eso la frecuencia de limpeiza dependerá de lo que nosotros elijamos.
Dentro los factores que hacen que se ensucie más o menos el cristal de una chimenea tenemos:
Calidad de la leña vs limpieza cristal de chimenea:
Al igual que la calidad de la leña, influye en la potencia calorífica que nos transmite, las cenizas y residuos que hace, y lo que dura ardiendo, ya que algunas arden rápido y proporcionan poco calor, según el tipo de leña también influirá para que se nos manche más o menos el cristal de nuestra chimenea.
En uno de los primeros artículos de nuestro blog hablamos sobre qué tipo de leña utilizar en nuestras estufas, cassettes, o chimeneas y pueden leerlo siguiendo el siguiente enlace:
Maderas de árboles frutales, de maderas tratadas como palets o traviesas de ferrocarril, tienen mucha resina, y ensucian mucho más el cristal, que una leña más noble como la carrasca o la encima.
A parte estos árboles resinosos, dejan pegado en el cristal parte de dicha resina y se vuelve mucho más costoso su lipieza.
Buena instalación de tubos vs ensucie cristal de chimenea y toque limpiar el cristal todos los días:
Cuando la chimenea, cassette de leña, estufa de leña, no tiene un buen tiraje, produce que el humo salga más lentamente, acumulándose más en la cámara de combustión y por lo tanto ensuciando más el cristal, sobre todo, al principio cuando el aparato está frío.
Un cristal de la chimena muy negro, nos puede indicar una falta de tiraje de la misma, y por lo tanto una falta de evacuación de humos, o un mal mantenimento de los tubos, a los que les falta limpieza, que hayan reducido su diámetro y el humo no salga correctamente, así como falta de limpieza del deflector, que tiene hollín acumulado, y el humo no hace el circuito para una rápida evuación del mismo.
Calidad de la chimenea (sistema cristal limpio):
No todas las chimeneas, cassettes de leña, inserts estufas de leña, queman igual, y esto está muy relacionado con la calidad y por ende con el precio del aparato.
Una cosas básica a mirar en la estufa o chimenea que compremos es que tenga el sistema de crista limpio , esto de partida ya nos asegura que el fabricante le ha dedicado tiempo en diseñar su chimenea con un sistema que reduzca el ensuciamiento del cristal.
Y después, de esto, si queremos una chimenea que apenas ensucie el cristal, preguntar al vendedor de chimeneas, ya que hay algunas chimeneas, que aunque de precio sean algo más altas, tienen un sistema de limpieza, que se aprecia, cuando el aparato se calienta, y apenas mancha el cristal.
Suele ser costumbre entre la mayoría de usuarios de chimeneas, estufas, cassetes, inserts de leña, que cuando van a encender su chimenea, realizan el siguiente proceso: ponene una pastilla de encendido, unos troncos de leña finos, unos troncos de leña más gruesas, encienden la pastilla y cierran la puerta, con lo que se fuerza la entrada de aire, por el cajón recogecenizas (entrada de aire primario), que eleva la llama y hace que en un primer se acumule más humo en la cámara de combustión, que hace que se ensucie el cristal.
El truco, es cuando se enciende la chimenea, no cerrar la puerta, dejarla entornada durante 30 a 45 minutos, que el aparato se caliente y se cree la depresión, así el humo, en vez de tener la tendencia de introducirse al salón, y nos mache el cristal, se irá por el tubo de la chimenea para arriba que es su misión.
Y si aún así, se sigue ensuciendo, en el encendido, poner primero troncos finos, sin toncos gruesos encima, para obtener bastante llama, y que se caliente el aparato y los tubos de la chimenea, y una vez que baje el fuego, poner troncos finos, y troncos más gruesos, así, se manchará menos el cristal.
Y después de todo, y dado que la leña genera humo y siempre se manchará un poco el cristal, ¿cómo hacemos la limpieza de los mismos?.
Limpiacristales para chimeneas.
Existen unos limpiacristales específicos para limpiar el cristal de las chimeneas, que llevan más cantidad de tensioactivos y deshacen mejor el hollín y la carbonilla que se acumulan en el cristal.
La forma correcta de aplicarle es “siempre con el cristal frío” sobre el paño o papel para hacer la limpieza, o sobre el cristal, pero sin dejar que chorre por encima del cordón de la puerta de la chimenea, ya que si se moja muchas veces, se acaba soltando.
Después con papel de cocina, limpiamos el cristal, y se debe quedar limpio.
Si tenemos una zona un poco más incrustada, un truco que nos comentó una cliente, es mojar un poco el paño con la ceniza de la chimenea, y aplicar encima, esto sirve como si fuese un árido, que “rasca” la suciedad.
Si el cristal se mancha, poco, muchos quitagrasas de hornos, o productos para la limpieza de cristales vitrocerámicos suelen ser útiles.
Hay varios modelos de limpiacristales para chimenea que funcionan muy bien, y que pueden encontrar en el enlace debajo de la fotografía.
Los modelos de limpia cristales específicos para estufas y chimeneas llevan tensioactivos para deshacer el hollín por lo que si nos ensucia mucho y cuesta limpiarlos es la opción mas recomendable.
Es un equipamiento básico que fundo con el deshollinador químico y la leña no pueden faltar para prepararse para pasar el frío de la temporada de invierno.
Limpiar chimenea
Para muchos propietarios, la limpieza de la chimenea se convierte en una tarea habitual.
Después de todo, el conducto de humos -la gran abertura hecha por el hombre en la parte superior de su chimenea o estufa de leña donde se quema la madera- es una estructura al aire libre, por lo que es importante mantenerla limpia y libre de residuos para evitar que el hollín y el monóxido de carbono que se acumulan en su chimenea le perjudiquen a usted y a su familia.
De hecho, la limpieza de la chimenea debe realizarse con regularidad para garantizar que la calidad del aire dentro de su casa sea segura para vivir.
Si no limpia su chimenea con regularidad, corre el riesgo de respirar hollín, humo y otros tipos de contaminación perjudiciales que pueden causar enfermedades e incluso la muerte.
Deshollinado de la chimenea
Mucha gente pasa por alto la limpieza de la chimenea cuando limpia otras partes de su casa, como el tejado o los canalones, pero el deshollinado es una parte crucial del mantenimiento de la chimenea.
Los deshollinadores (que se parecen mucho a los barrenderos) se fijan a los edificios altos y se sitúan en la parte superior de la chimenea, barriendo el hollín y los residuos que se acumulan allí.
Puede ser un trabajo sucio y que requiera mucho tiempo si no se cuenta con un equipo profesional, pero hay varios beneficios de barrer rutinariamente la chimenea:
Aspirar
Al igual que con cualquier tipo de limpieza del hogar, es importante utilizar las herramientas y los métodos adecuados para limpiar la chimenea.
A diferencia de los deshollinadores y las aspiradoras, las herramientas de cepillo no pueden introducirse entre las capas de los tejados inclinados, las grietas y las molduras de ladrillo; no pueden llegar a las esquinas y uniones del tejado; y no pueden alcanzar con seguridad las pendientes y crestas del tejado.
Si decide barrer con una escoba o un cepillo, asegúrese de utilizar una escoba con un mango largo y cerdas diseñadas para la limpieza de chimeneas.
Barrer toda la chimenea
Aunque las chimeneas son generalmente herméticas, algo de creosota puede filtrarse a través de la malla y entrar en los espacios habitables de la casa.
Una buena limpieza del interior de la chimenea también ayudará a eliminar las filtraciones. Deshollinar el interior de una chimenea también ayudará a desalojar la suciedad y los residuos que puedan haberse acumulado con el tiempo, especialmente si se trata de limpiar la chimenea antes de que necesite ser limpiada.
Un buen barrido sacará los restos y la creosota acumulados, así como las pequeñas partículas de ceniza y brasas.
Cepille los lados de la chimenea
Si va a limpiar toda la chimenea con un cepillo, asegúrese de quitar los trapos y el cepillo de ambos extremos del techo.
Utilice un detergente de limpieza no tóxico para aflojar y eliminar el alquitrán, la brea y el canalón a lo largo de los lados del tejado, y luego aclare con agua limpia.
Es mejor no aclarar el material del tejado; puede crear un suelo resbaladizo cuando está mojado, y el alquitrán y el canalón se aferrarán al tejado y a otras superficies en lugar de ser lavados.
Una vez aclarado el tejado, rocíe la zona con una manguera de alta presión para eliminar los restos de la solución limpiadora.
Inspeccione la chimenea
Antes de la visita de su deshollinador profesional, querrá inspeccionar el interior de su conducto de humos para asegurarse de que todo está en buen estado de funcionamiento.
Si hay algún problema, como una acumulación de suciedad o residuos en una grieta, será necesario eliminarlo antes de que llegue el deshollinador profesional.
También puede inspeccionar el exterior de su chimenea en busca de cualquier signo de filtración o daños en el techo o las paredes.
Antes de utilizar su chimenea durante la temporada de combustión, debe limpiar el interior de su conducto de humos. Antes de permitir que la leña se queme, debe asegurarse de que esté limpia.
Cuando empiece a notar una acumulación de residuos, debería disponer de un limpiador comercial en su tienda local de artículos para el hogar, para que sea fácil de limpiar.
Utilizar un limpiador sin reaccionar sólo extenderá el problema más adelante y hará que sea más difícil deshacerse de él, cuando realmente tenga que limpiarlo.
El día de su visita, el cepillo para chimeneas y el respiradero son probablemente las herramientas más importantes que utilizará.
El cepillo se utilizará para acceder al conducto de humos desde cualquier lado, y el respiradero se utiliza para eliminar cualquier material quemado y limpiar las paredes.
Tener ambos a mano le permitirá llegar a todos los lados de la chimenea a la vez, lo que le ahorrará tiempo, esfuerzo y dinero.
El pequeño cepillo de alambre se utiliza para limpiar el interior de la compuerta y el exterior de la misma, pero puede no ser necesario si ha inspeccionado el conducto de humos y no ha encontrado ningún problema.
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Con más de 25 años de experiencia en el sector de las ventas de equipamiento para el hogar, herramientas de bricolaje, y en los últimos 15 años en una empresa de reformas de albañilería, venta de azulejos y materiales de construcción, estufas leña, pellets, chimeneas, sistemas de calefacción.
Máster Técnico Superior en riesgos laborales.
Licenciado por la Universidad de Alicante ua.es
Muchas gracias! muy útil, estaba buscando justo tus respuestas.
Muchas gracias a usted por leernos y por comentar en el blog.
Un saludo!!
Hola buenas! Yo quiero dar mi opinión y compartir mi experiencia con respecto a la limpieza del vidrio de la chimenea!
Verán, he utilizado de todo, el producto específico para chimeneas, las cenizas, el papel absrovente, ….todo lo que he leído por la red …. pero ,lo que menos trabajo me da y como mejor queda es con amoniaco perfumado, con la diferencia de precio… por 1 € y poco tienes 1 litro de este producto,frente a los 8€y pico del producto específico….El cristal frío ,dejándolo actuar uno minutos (así se mitiga el olor y vapor) y se limpia fenomenal ……si hay algo muy pegado lo ayudó con una rasquetea de vitroceramica..saludos
Hola María.
Muchísimas gracias por compartir su experiencia.
Es de mucha utilidad.
Sin otro particular, agradeciéndole su participación en el blog sobre limpiar el cristal de una chimenea, reciba un cordial saludo.